Divas, amigas y afinadas

Dir.: Elizabeth Banks
Int.: Anna Kendrick, Rebel Wilson, Brittany Snow, Hailee Steinfeld, Adam DeVine, Skylar Astin, Anna Camp, Ben Platt, Katey Sagal
¿De qué va?: Tres años después de que las Bellas ganasen el campeonato nacional de grupos a capela, casi todas sus integrantes están a punto de terminar la universidad. Mientras Beca empieza a intentar hacerse un hueco en el mundo de la producción musical, el futuro de las Bellas corre peligro y sólo una victoria en el campeonato mundial de coros salvaría al grupo de su extinción.

Reseña: Hay películas que no causan mucho ruido en el momento de su estreno, pero que gracias al boca a boca, los pases televisivos y, obviamente, las descargas, consiguen convertirse en un fenómeno de masas. Sólo así se explica que en su primer fin de semana en el box office americano, Dando la nota - Aún más alto (Pitch Perfect 2) haya recaudado 70 millones de dólares, 5 millones más de lo que consiguió la primera parte en todo su recorrido en los cines del mismo país. Vamos, que todo apunta a que las Bellas de Barden se quedarán con nosotros durante mucho tiempo.

Elizabeth Banks no sólo repite su descacharrante papel de Gail, la comentarista oficial de los concursos a capela, inseparable de su compañero misógino John Smith (John Michael Higgins), sino que también ha tomado la riendas de la dirección de una secuela que ya no es tanto un tributo a la comedia universitaria y juvenil a lo John Hughes, sino una comedia en la línea de La boda de mi mejor amiga que celebra la camaradería entre un grupo de amigas que sufre el síndrome de Peter Pan, debiendo tomar decisiones más propias del mundo real que de una hermandad universitaria, y todo ello amenizado por varios números musicales  que versionan y mezclan temas de ayer y hoy, incluyendo un ‘riff-off’ más espectacular que el de la primera parte, y una gran competición final contra un grupo que va de sobrado.

Tampoco faltan a la cita los gags autorreferenciales y los políticamente incorrectos, como los que se centran en el personaje de Chrissie Fit, a costa del drama latinoamericano, similares a las burradas que suele soltar Sofía Vergara en Modern Family. Fat Amy (Rebel Wilson) ha ganado tanto peso corporal como protagonismo en la historia, y aunque sigue siendo bastante graciosa y su química con Adam DeVine funciona genial, hay escenas en las que su chascarrillo parece forzado. Las esporádicas y sorprendentes revelaciones de Hana Mae Lee siguen generando las mayores carcajadas, mientras que Anna Kendrick y Brittany Snow siguen igual de encantadoras, preparándose para ceder el testigo a Hailee Steinfeld, quien presumiblemente será la protagonista de la inevitable tercera parte. Esta chica no me termina de convencer, la veo muy forzada, así que no sé si dará la talla como recambio generacional, veremos.

Si te gustó la primera parte, es bastante probable que también disfrutes con su emotiva secuela, aunque puede que un poco menos: empieza mucho mejor de como acaba, los temas no son tan pegadizos, y tiene algunas de esas escenas en las que puede que el equipo se lo haya pasado en grande rodándolas, pero eso no implica que el público lo esté pasando igual de bien (uno de los grandes males de la comedia americana). Pese a sus contras, Dando la nota – Aún más alto acierta al ofrecer cosas nuevas al tiempo que repite las que funcionaron en la película original, y es motivo de celebrar que sea la primera franquicia hollywoodiense protagonizada por mujeres y que su mayor preocupación no consista en buscar novio. Eso sí, las Bellas corren peligro de perder su encanto cuando sean conscientes de lo mucho que molan y las masas que arrastran, tal y como pasó con Glee. Ojito con eso.

7/10